Cómo aprenden los perros: Leyes básicas del aprendizaje canino

Cómo-aprenden-los-perros

Cómo aprenden los perros

Principios esenciales del aprendizaje canino

La educación canina es fundamental para mejorar la convivencia entre los perros y sus dueños. Pero realmente, ¿cómo aprenden los perros? Para entenderlo, debemos conocer las leyes del aprendizaje, que son principios básicos que explican cómo los animales, incluidos los perros, adquieren nuevos comportamientos.

Las Leyes del Aprendizaje en los Perros

Estos principios provienen de la psicología del comportamiento y se aplican tanto en animales como en humanos. Aquí te explico las más importantes y cómo aplicarlas de forma práctica en la educación de tu perro.

1.Condicionamiento Clásico: Asociaciones Automáticas

El condicionamiento clásico es una de las formas más básicas de aprendizaje. Fue descubierto por el científico ruso Iván Pávlov en sus estudios con perros. Él observó que los perros empezaban a salivar al escuchar el sonido de una campana que solía acompañar la comida, aunque no hubiera comida a la vista. Esto se debe a que habían aprendido a asociar la campana con la comida.

¿Cómo se aplica en la educación canina? Puedes usar el condicionamiento clásico para asociar ciertos estímulos con emociones positivas. Por ejemplo, si tu perro se asusta cuando escucha el timbre de la puerta, puedes entrenarlo para que asocie el sonido del timbre con algo positivo, como un premio o un juguete. Cómo aprenden los perros a través de estas asociaciones es clave para transformar experiencias negativas en comportamientos positivos. De esta manera, el perro comenzará a esperar algo bueno en lugar de tener miedo.

2. Condicionamiento Operante: Recompensas y Castigos

El condicionamiento operante es un principio de aprendizaje basado en las consecuencias. Fue desarrollado por BF Skinner y establece que los comportamientos se refuerzan o eliminan en función de las consecuencias que los señales.

Refuerzo positivo: Agregue algo que el perro disfrute (comida, caricias, juegos) para aumentar la probabilidad de que repita un comportamiento. Por ejemplo, si el perro se sienta cuando se lo pides, y le das una golosina, es probable que en el futuro se sienta con más frecuencia cuando se lo pidas.

Refuerzo negativo: Retirar algo que el perro considera desagradable para aumentar la probabilidad de que repita el comportamiento deseado. Un ejemplo sería dejar de aplicar presión en la correa cuando el perro deja de tirar, lo que lo enseña a caminar sin tensión.

Perro_correa_sin_tensión_correa_en_tensión
A la izquierda paseando sin tensión en la correa, a la derecha perro tirando de la correa.

Castigo positivo: Añadir algo que al perro no le gusta para reducir un comportamiento. Un ejemplo es un sonido fuerte o un ″No″ firme si el perro está haciendo algo inapropiado.

¿Cómo se aplica en la educación canina? El refuerzo positivo es la técnica más recomendada para entrenar a los perros porque fomenta el aprendizaje de manera amable y efectiva. Cómo aprenden los perros con refuerzos positivos es esencial para motivarlos y lograr que repitan los comportamientos correctos. Si premiamos las acciones deseadas, estarán más inclinados a repetirlas.

3. Extinción: Ignorar lo Indeseado

La extinción ocurre cuando un comportamiento deja de producir una recompensa, por lo que el perro deja de hacerlo. Si tu perro te salta encima para llamar la atención, y tú siempre lo acaricias, lo estás reforzando. Sin embargo, si deja de prestarle atención cuando lo hace (por ejemplo, dándole la espalda o ignorándolo), eventualmente dejará de saltar, porque ya no recibe la atención que buscaba.

¿Cómo se aplica en la educación canina? Este principio es muy útil cuando el perro realiza un comportamiento para obtener una respuesta (como ladrar para llamar la atención). Si elimina el refuerzo (la atención en este caso), el perro aprenderá que esa conducta no le trae lo que desea.

Perro-ladrando
Perro ladrando para obtener atención

4. Generalización y Discriminación:

Aplicando el Aprendizaje en Diferentes Contextos

Los perros también pueden aprender a generalizar o discriminar comportamientos en diferentes contextos.

Generalización: Es cuando el perro aplica lo que ha aprendido en una situación a diferentes situaciones. Por ejemplo, si le enseñas a ″sentarse″ en casa, es probable que también lo haga en el parque.

Discriminación: Es cuando el perro aprende a distinguir entre diferentes estímulos. Por ejemplo, un perro puede aprender que se sienta cuando le dice ″sit″, pero no cuando escucha otras palabras que suenan similares, como ″sol″.

¿Cómo se aplica en la educación canina? Es importante entrenar a tu perro en diferentes entornos para que generalice los comandos y comportamientos. Entender cómo aprenden los perros en distintos contextos garantiza que respondan igual tanto en casa como en el parque o en la casa de un amigo. La discriminación, por otro lado, te permite enseñarles a diferenciar entre situaciones y comandos específicos.

5. Imitación y Aprendizaje Social: Cómo aprenden los perros

Aunque los perros no imitan tan fácilmente como los humanos, pueden aprender observando el comportamiento de otros perros o incluso de las personas. Por ejemplo, un cachorro podría aprender a sentarse rápidamente al ver a otro perro recibir recompensas por hacerlo.

¿Cómo se aplica en la educación canina? Si tienes varios perros, el aprendizaje por imitación puede ser útil. Si uno de ellos ya sabe un truco o comportamiento, el otro puede aprender más rápido observando. Incluso pueden aprender rutinas de convivencia social observando cómo interactúas tú con ellos.

Dos-perros-sentados-en-sillas

Las leyes del aprendizaje ofrecen un marco invaluable para entender cómo aprenden los perros y cómo podemos aplicar este conocimiento en su educación. Desde el condicionamiento clásico y operante hasta la generalización y la discriminación, cada principio nos ayuda a construir una relación más sólida y efectiva con nuestros compañeros caninos. Al enfocarnos en métodos basados en el refuerzo positivo, la práctica constante y la paciencia, podemos no solo mejorar su comportamiento, sino también fortalecer nuestro vínculo con ellos. Recuerda, comprender cómo aprenden los perros es la clave para un adiestramiento exitoso y una convivencia feliz.